Después de una intensa lucha en equipo, Andrade y Ángel Garza ganaron el derecho de enfrentarse a The Street Profits para buscar arrebatarles los cinturones. Los mexicanos se impusieron ante los The Viking Raiders, Ricochet y Cedric Alexander, quienes no se cansaron de dar batalla. Llaves, patadas, rodillazos, golpes contra las cuerdas, invadieron el ring, las Superestrellas convirtieron el combate en un festival, entraban y salían rápidamente, tratando de neutralizar a sus rivales.
Desde la mesa de comentaristas, Montez Ford y Angelo Dawkins vieron toda la acción que generó la batalla entre quienes amenazan con quitarles su reinado. El combate era parejo, hasta que Garza, Ricochet, Cedric y Erik, se amontonaron en una esquina, Ivar subió a la tercera cuerda y se lanzó sobre ellos, el regiomontano logró evadir la caída, Andrade bajó del cuadrilátero y aprovechó para ir sobre Cedric, quien no consiguió levantarse después de la cuenta del réferi. El hijo de Rey Mysterio volvió a Raw para cobrarle a Seth Rollins lo que hizo con su papá en El Show de Horrores de Extreme Rules. El “Monday Night Messiah” recibió a Dominik con los brazos abiertos, pero él respondió con un ataque por la piernas derribándolo, Murphy rescató a Rollins y entre los dos atacaron al hijo del amo del 619. Dominik intentó defenderse pero el ataque siguió.
De pronto Aleister Black entró para ayudar a Dom, pero sólo consiguió una paliza y la lesión de su ojo derecho, tal como Mysterio.
Por otra parte, otro mexicano, Humberto Carrilo, salió al quite para hacer frente al discípulo de Rollins.
El mexicano intentó hacer uso de su lucha aérea, para contrarrestar los embates de Murphy, pero todo fue inútil, Carrillo recibió patadas, candados y golpe y un rodillazo que lo dejó en la lona. Desde el inicio de la lucha, Humberto lució debilitado, la fuerza del australiano se impuso en el ring y con su rival sin oponer tanta resistencia, se quedó con la victoria de la noche.
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